En palabras sencillas, diremos que una sociedad offshore es la que tiene su sede en el extranjero. Por ejemplo, una sociedad panameña cuyas operaciones se realizan fuera de Panamá.
Al respecto, el país no tiene ninguna ley especial para las sociedades offshore, ya que los ingresos por estas operaciones no son considerados en Panamá.
Las sociedades offshore no pagan impuestos en Panamá con excepción de la Tasa Única, una cifra de alrededor de $300 al año, básicamente para existir a nivel legal.
No obstante, estas sociedades deben pagar los impuestos que les corresponda pagar en el país donde están operando.
Además, aunque no pagan impuestos en Panamá, su información contable sí debe reportarse a su Agente Residente en el país, quien realizará el correcto monitoreo y resguardará la información en caso de que sea solicitada por una autoridad competente. Valga aclarar que esta información es confidencial.
En términos generales, este tipo de sociedades facilitan el comercio global y minimizan el pago de impuestos internacionales.